ASSAAD AWAD, UN DISEÑADOR CREATIVO, EXCÉNTRICO Y FUTURISTA

“En un mundo dominado por el “copy-paste” es necesario una vuelta a lo artesanal”. Con esta frase resume su filosofía el diseñador libanés Assaad Awad, enamorado de la artesanía española, que tiene en Madrid su propio taller. Nacido en Beirut trabajó durante 14 años en agencias de publicidad de Oriente Medio hasta que se decantó por la moda. El “ecolujo” es la base de su mundo creativo. Realiza complementos originales y atrevidos que le han dado fama y clientas tan mediáticas como Madonna y Lady Gagá. Asegura que le gusta hacer cosas útiles, no sólo bonitas, y entrar en el juego de unir lo funcional con lo estético.

Le conocí en el Museo del Traje donde se muestra una interesante exposición, abierta hasta el 28 de octubre, que pone en relación sus complementos con la obra de Balenciaga. Impresionado por la pureza de líneas y el trabajo experimental del gran maestro vasco, Assaad Awad tomó como punto de partida sus modelos para crear piezas y complementos inspirados en sus formas y rendirle un cálido homenaje. En las vitrinas del Museo se puede contemplar el contraste de dos momentos de la Historia de la Moda con la obra dispar de dos artistas que desde mundos opuestos y con materiales muy distintos tienen en común la precisión y el perfeccionismo. 

-¿Qué le hizo cambiar la publicidad por el diseño de moda? -Me cansé de trabajar en la publicidad. Es un mundo bastante difícil donde muchas veces tienes que dejar tus principios a un lado, y además sentía que ya lo había dado todo, necesitaba un cambio, aprovechar más mi creatividad en hacer cosas que realmente me gustaban. 

-¿Cómo fueron sus primeros pasos como diseñador? -Fue todo un poco por casualidad, no fue nada planeado. Comencé diseñando trajes para bailarines de espectáculos y discotecas. Querían cosas poco comunes, por ejemplo trajes que incorporasen luces, y yo me lo puse como reto, sabía que podía hacerlo y así fue como empezaron a salir mis primeros diseños, planteándome cómo hacer cosas que nadie había hecho hasta entonces. 

-¿Por qué se estableció en Madrid? ¿Le pareció más interesante que hacerlo en París o Nueva York?  -Vine a Madrid de vacaciones y me enamoré y en menos de un año ya estaba instalado aquí. Me gusta porque es una ciudad tranquila y cómoda donde el nivel de vida es muy bueno y tiene una climatología privilegiada con muchas horas de sol. Me parece más interesante que París o Nueva York porque puedo estar un poco apartado de todo el ruido de las tendencias y concentrarme en mi trabajo. Esos Fashion Hubs son interesantes para el negocio pero para diseñar yo necesito un sitio mucho más tranquilo. 

-Ha manifestado que es necesaria una vuelta a la artesanía, ¿en que se basa?  -Hoy en día todo es un “Corta y Pega”. La industria de la moda ha impuesto una aceleración donde hay muy pocos que puedan aguantar el ritmo de crear dos y a veces hasta tres o cuatro colecciones al año manteniendo un nivel alto. Hay una saturación de la creatividad. Y como faltan las ideas se recurre a la copia. Por otro lado tenemos el problema de las firmas low cost contra las que una firma pequeña no puede competir, ya que ellos tienen unos precios imbatibles fruto de su volumen de negocio. Yo defiendo una slow fashion, una moda más auténtica, hecha con materiales de primera calidad y con unos acabados perfectos. Mis diseños no son de usar y tirar, son piezas para toda la vida. 

-¿Cuáles son sus materiales favoritos?  -Sin ninguna duda el cuero. Pero una de las cosas que me caracterizan es trabajar con todo tipo de materiales, me gusta probar siempre cosas nuevas y ver qué resultados puedo conseguir. Tengo una forma de trabajar muy experimental y siempre me planteo nuevos retos. 

-Entre sus clientas se cuentan Madonna y Lady Gaga. ¿Cuáles son las piezas más importantes que ha diseñado para ellas?  -No distingo mis piezas por importancia, para mí todo lo que sale de mi taller es importante porque está hecho con mis manos y con mucha dedicación. Quizás destacaría el vestido de virutas de madera que llevó Lady Gaga porque fueron virutas hechas a mano con un método tradicional de afeitado de la madera que ya está en desuso y tuve que recurrir a un experto ebanista asturiano para que me las hiciera una a una. 

-¿En sus diseños busca más la estética, la funcionalidad o la originalidad?  -Creo que lo mejor es encontrar un equilibrio. Yo estudié varios años en Suecia y ahí me familiaricé mucho con el diseño industrial que es algo que me apasiona, por eso mis piezas siempre están muy pensadas e intento que sean funcionales a la par que estéticas. Pero siempre depende del diseño. Hago piezas que son puro capricho, las hago porque me gustan y no pensando en el lado comercial, aquí sí que prima el diseño y la originalidad. Pero también hago piezas, como las de mi colección Urban, donde la funcionalidad tiene mucho peso, ya que son bolsos pensados para el día, para el entorno laboral y ahí se necesita que sean cómodos y funcionales, pero sin renunciar a la estética. 

-¿Dónde se fabrican tus bolsos y accesorios de cuero?  -Trabajo con artesanos de Ubrique y también en mi taller. 

-Su atelier de Lavapiés, ¿qué características tiene? ¿Con que idea o filosofía lo ha montado?-El atelier de Lavapiés era un local que alquilé en el mismo edificio donde vivo para poder trabajar. Allí fue donde comenzó todo, en una pequeña corrala de Lavapiés. La filosofía siempre fue la de un espacio de trabajo, un sitio donde tener mis herramientas y mis materiales y un poco de tranquilidad para poder trabajar. 

-¿Trabaja con bocetos para realizar tus piezas?  -Mi forma de trabajar es muy experimental y no siempre tengo claro qué es lo que va a salir cuando empiezo. Alguna vez hago un boceto, pero prefiero enfrentarme a la pieza, hacerla con mis manos, ver los problemas que tiene y ya una vez terminada suelo hacer un dibujo. Así tengo un control total de la pieza y si alguien tiene que repetirla o tengo que enviarla a producir, sé realmente cuál es el resultado que busco y qué es lo que tengo que pedir exactamente. No soy el típico diseñador que manda a producción un boceto. 

-¿Ha diseñado recientemente para alguna obra de teatro?  -He diseñado y confeccionado varios de los trajes de la ópera "El Público" basada en el texto de Federico García Lorca, que tuvo su estreno mundial hace unos meses en el Teatro Real de Madrid. 

-¿Cuáles son sus proyectos inmediatos?  -Voy a impartir una serie de cursos para artesanos y estudiantes en mi taller de Hermosilla 59, porque por un lado creo que hay un déficit de artesanos en España, y por otro creo que muchos artesanos necesitan renovarse y actualizarse. No podemos dejar perderse las tradiciones si realmente queremos una industria de la moda potente. También estoy diseñando mi próxima colección y preparando una presentación de mi trabajo en Hong Kong.