RALPH LAUREN: CON EL COLOR DEL SOL

El diseñador americano nunca defrauda con sus propuestas tan chic como favorecedoras. Fiel a sus lujosas telas y luminosos tonos, esta vez establece una unión entre el estilo más desenfadado, en tradicionales saharianas y mucho color caqui, con el esplendor y colorido del barroquismo asiático. Tonos vivos, violentos, como los cálidos rayos del sol, junto a los arenas, tostados, caqui, blanco y negro.

Lo principal que salta a la vista es la influencia oriental en esta colección vitalista de estilo hindú, con casacas rajás, telas y complementos vistosos. Ningún estampado, sólo tonos planos combinados audazmente entre sí partiendo del neutro, caqui o tostado y alegrándolo con amarillo limón, naranja, rosa, púrpura, etc. 

Saharianas y pantalones pitillo, chaquetas estructuradas con faldas lápiz y evasé, cazadoras con pantalones capri, vestidos camiseros con bolsillos, monos fluidos, ligeras gabardinas de verano, camisetas y blusas vaporosas, en cuanto a prendas. 

Y los tejidos van desde la piel y el ante al gazar, la organza, las sedas brillosas, los rasos de algodón, el perlé, el tul y el tafetán. Efecto arrugado y metalizado en algunas prendas.

Los vestidos largos no pierden el hilo concedido por el diseñador al conjunto de la colección: los tops safaris combinan con vaporosas faldas mil hojas de tul, y vestidos con cuerpos drapeados y faldas plisadas en vivos colores para las noches de verano.