PRÓXIMA BODA EN EL PALACIO DE LIRIA

La primavera de este año no solo nos trae noticias económicas y sanitarias alarmistas y poco claras sino que da también paso a otras noticias alegres y románticas, como es por ejemplo la próxima boda de Carlos Fitz-James Stuart, Conde de Osorno, el hijo menor del Duque de Alba, con Belén Corsini, hija de Juan Carlos Corsini y Mónica Lacalle, una familia de la aristocracia financiera de Madrid. El lugar también es de lujo: el Palacio de Liria, el único de Madrid que sigue habitado y que ahora puede ser visitado por el público.

En septiembre del 2019 se abrieron las puertas de este palacio para todo el que quisiera extasiarse ante sus incomparables tesoros artísticos pero la pandemia hizo que solo se pudiera visitar unos meses. Ahora, desde el pasado 21 de marzo hasta finales de mayo, los visitantes tienen además una nueva oportunidad, la de admirar estos tesoros artísticos a través de los versos del poeta Guillermo Arroniz, una visita guiada con 13 sonetos en los que se mezclan la historia y el arte. 

La próxima boda de Carlos y Belén -Condes de Osorno- será el gran acontecimiento que se celebrará entre los muros de este palacio. Hasta ahora no se había podido concretar fechas debido a la situación del país pero parece que se ha arriesgado ya una fecha fija: el 22 de mayo. Como es lógico, se trata ahora de conocer detalles sobre la novia, que no ha tenido la proyección mediática de su futuro marido, y además es poco dada a mostrar retazos de su vida, y la prueba es que cuando se empezó recientemente a divulgar la noticia de su boda cerró sus cuentas en las redes sociales. 

Belén Corsini estudió primero en el colegio Mater Salvatoris de Madrid y después cursó la carrera de Administración y Empresas en ICADE Bussiness School, lo mismo que Carlos. Se comenta que es la mano derecha de su padre y ha tenido siempre cargos en las empresas familiares. Viste de un modo sencillo y clásico pero con un exquisito buen gusto y solo demuestra una predilección por los complementos más llamativos. Esta inclinación se ha podido apreciar en las bodas a las que ha asistido junto con su novio: la de Valentina Suárez Zuloaga en Zumaya, en la que lució unos enormes pendientes y en la de los marqueses de Pickman en Sevilla, donde llamó la atención con un tocado de tul con una flor monumental. 

Ahora, el único dato a debatir es si la boda en el Palacio de Liria será en la capilla del mismo. Recordamos el disgusto de Sofía Palazuelo que se casó también en Liria pero no pudo hacerlo como ella deseaba en la capilla del palacio porque se negó en rotundo su futuro suegro, el Duque de Alba, porque tenía poca capacidad para albergar a los invitados previstos. Parece ser que la próxima boda, dadas las circunstancias actuales, contará con menos invitados. 

Como antecedentes recordamos que la ceremonia de la boda de Fernando y Sofia se celebró en los maravillosos jardines del palacio y dada la fecha de la próxima boda es de esperar que se vería acompañado de un tiempo espléndido. De hecho, la boda del actual Duque de Alba con Matilde Solís se celebró en la catedral de Sevilla, lo mismo que la de Cayetana con Luis Martínez de Irujo. Total, que la próxima noticia será el lugar exacto de la ceremonia.