LAS NOVIAS VUELVEN A BARCELONA

La moda española siempre ha tenido un firme punto de apoyo en la moda nupcial muy valorada en todos los países. La Bridal Fashion Week de Barcelona había destacado por sus ferias y desfiles de novias pero después de que la pandemia los arrumbara durante dos años han vuelto a un primer plano de la moda. El certamen de este año celebrado del 20 al 23 de abril era esperado con una gran expectación para ver cómo reaccionaria el sector después de este largo parón y se ha podido comprobar que la reacción ha sido muy positiva. Se ha empleado el formato digital y ha mostrado una notable recuperación. Rosa Clará declaraba esta visión optimista al terminar las presentaciones: “Estamos en cifras muy por encima del año 2019”. 

La feria y los desfiles que han tenido lugar en los pabellones 1 y 2 del Palacio Ferial de Montjuich marcan unas cifras muy elocuentes. Han participado 320 marcas de 27 países con una asistencia de un 65% de marcas internacionales y han desfilado 34 diseñadores. Además, la digitalización de la BBFW conserva su plataforma y se puede acceder con facilidad a todos los contenidos del certamen hasta el mes de junio. La organización señala también la presencia de 1.170 compradores y 18.600 visitantes. La Feria ha presentado una nueva colaboración solidaria con el proyecto “Save the children” contra el matrimonio infantil, en esta ocasión del que se perpetra en Mauritania. 

En este esperado retorno ha habido también noticias muy positivas, como la presentación de la acreditada firma de moda holandesa de Viktor Horsting Viktor&Rolf que por primera vez presentaba un desfile de novias de Alta Costura en pasarela. En general todos los desfiles han demostrado un gran afán de ofrecer novedades y un diseño de calidad que pudiera seguir manteniendo en todos los países el gran prestigio de la moda nupcial española. Jesús Peiró estrenó la pasarela con su colección “Las ninfas” en la que dedicaba un recuerdo a Ucrania con sus ramos de flores azules y amarillas y desfilaron firmas de gran categoría como Rosa Clará, Isabel Sanchis, la firma oriental Zuhair Murad y tantas otras. El broche de oro de la BBFW fue el ProNovias, el único reservado a la moda presencial dentro de su línea Atelier Pro Novias. 

Aunque las tendencias eran muy variadas podemos destacar las faldas voluminosas, una paleta de blancos variadísima, abundancia de lazos y flores, combinaciones de tejidos ligeros en chantilly o Jacquard, tules suaves. Todo dentro de un halo romántico con algún discreto toque oriental.