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ELIO BERHANYER : LA MODA DEBE SER EL OCTAVO ARTE

ENTREVISTA, enero 2009
por Josefina Figueras | Nº 31
Elio Berhanyer
Elio Berhanyer
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Su trayectoria se identifica con la historia de la moda española. Elio Berhanyer ha vivido la etapa gloriosa de la Alta Costura y las incidencias del pret a porter. Más de cincuenta años al pie del cañón en medio de éxitos y de momentos difíciles pero sin perder jamás el pulso de una creación que ha sabido adaptarse a todas las situaciones. Una exposición en el Museo del Traje recuerda sus creaciones y la perfección de una forma de hacer costura que sobrevive a épocas y estilos.

En su taller de la Calle Fortuny y bajo los modelos espectaculares colgados en las perchas, destaca un traje de organza blanco, con círculos de lentejuelas y perlas, a medio hacer. Es la reproducción del traje que el diseñador hizo para la Reina Sofia para la primera cena de gala celebrada por los Reyes en el Palacio Real de Madrid. Está inspirado en el vestido de novia de la Emperatriz Josefina cuando se casó con Napoleón. "Esta reproducción es el capricho de una clienta" me cuenta Elio, que, como siempre, demuestra durante la entrevista, su apasionado amor por la moda y su carácter entrañable y cordial que el paso del tiempo no logra enturbiar

-Hábleme de sus comienzos. Creo que de pequeño quería ser arquitecto….
Así es, pero no pude llegar a serlo porque mi familia no tenía medios para darme estos estudios, pero en mis colecciones mi inspiración no eran ni Dior ni Balenciaga, eran Le Corbussier y los arquitectos. Por eso quizás empecé con una moda muy dura, muy arquitectónica. Esto le ocurrió tambíén a Courreges y a Ungaro. Ellos salieron de los talleres de Balenciaga pero no quisieron seguir la trayectoria del maestro, como yo que tampoco quise porque deseaba tener una imagen propia. Si fuera pintor admiraría a Velazquez, pero no intentaría pintar como Velazquez, porque se que nunca lo conseguiría.

-¿Cual fue su primer trabajo como diseñador?
Empecé con diseños para el teatro a través del TEU –Teatro Español Universitario- trabajaba además como botones en la revista “Astra” y tuve la oportunidad de hacer unos diseños para esta publicación. Entonces me encargaron la decoración de los escaparates de la Casa Elisabeth Arden que tenía sus salones en la Puerta de Alcalá. Inventé una serie de sombreros muy originales que fueron muy alabados por las clientas. Después de esto me encargaron tres modelos "para entretener a las señoras mientas las peinaban" me dijeron. En realidad esta fue mi primera colección. Los llevaron a su boutique de Nueva York y me hicieron una oferta para trabajar en Estados Unidos pero yo decliné la oferta y propuse a un dibujante que empezaba a hacer sus pinitos con los modistos Herrera y Ollero: era Oscar de la Renta.

-¿Cuándo se lanzó a abrir su primera casa de costura?
Tuve la oportunidad de asistir a una colección de Pedro Rodriguez. Me impactó su moda, sus trajes bordados… Al cabo de poco tiempo abrí mi casa de costura en la Calle Ayala contando solo con una costurera y un aprendiz. La directora de Elisabeth Arden me proporcionó una lista de posibles invitados. Asistieron 12 mujeres y 30 hombres. Yo invitaba a los desfiles siempre a más hombres que a mujeres porque los hombres nunca saben de quien es un vestido y de esta forma cuando vieran uno mio podrían decir "este es un Berhanyer".

LLEGA EL EXITO 
El éxito de Elio Berhayer no se hizo esperar. Las grande revistas americanas como Vogue y Harper´s empezaron a interesarse por sus creaciones. Su moda caló rapidamente entre los circuitos más exigentes da la moda internacional. Su primera colección en el extranjero fue en la Casa Cadillac de Estados Unidos que le concedió el "Premio al mejor diseñador del año". En 1964 presentó su colección de primavera en el Pabellón de España de la Feria Mundial de Nueva York. En 1968 Elio, junto con Pertegaz, fueron los nombres "estrella" de las colecciones que el Ministerio de Información y Turismo presentaba en Madrid y Barcelona. La Alta Costura española tenía un lugar en el mundo…

-¿A que mujeres importantes ha tenido ocasión de vestir? 
A muchas. Durante doce años a la Reina Sofia –cuando era princesa de España- y también después, hasta que dejé la Alta Costura También tuve ocasión de vestir a muchas artistas importantes. Recuerdo que Ava Garner, a quien considero la mujer más bella que he visto en mi vida, me encargó un sastre negro con una camisa blanca. Cuando la estaba probando se fijó en un libro de historia que estaba sobre la mesa en el que se veía una foto con las característica gola de los Austrias. Me dijo entonces que le gustaría que su blusa blanca en vez de ser camisera, tuviera una gola parecida pero yo la disuadí diciéndole que "una cara tan bella como la suya no podía llevar nada que distrajera la atención".

-¿Cuándo se lanzó al mundo del pret a porter?
En 1969 inicié mis colecciones de zapatos y, siempre en paralelo con la Alta Costura, presenté mi colección "Ready To Wear Elio Berhanyer Vanguardia" junto con el lanzamiento de los perfumes "Zarabanda" y "Elios" y de una colección de accesorios como zapatos, bolsos, foulards…

-¿Qué diferencias señalaría entre la Alta Costura y el pret a porter desde el punto de vista de un diseñador?
Cuando el pret a porter va a las tiendas no sabes nunca quien lo compra, quien lo lleva y si la gente se equivoca al elegirlo, en cambio con la Alta Costura tienes a la clienta enfrente, las pruebas, la aconsejas, le modificas la línea, estás a su servicio; es un mundo totalmente diferente. Añoro mucho la Alta Costura pero siempre, incluso cuando hago pret a porter para la Pasarela Cibeles, hago cosas que entran en el terreno de la Alta Costura y que una fábrica no puede copiar, porque es muy difícil que se pueda reproducir en serie.

-¿Por qué la Alta Costura acabó en España de una manera tan drástica?
Por el impuesto de lujo tan brutal que nos pusieron. Justo en la misma época en que el gobierno italiano quitó los impuestos, en España nos marcaron un impuesto del 60% sobre las ventas. En el año 78 cerramos nuestra casa de costura Pertegaz, Pedro Rodriguez y yo.

EL OCTAVO ARTE
En el año 94 Cibeles lanza una noticia importante: la incorporación a la Pasarela de Elio Berhanyer. Habian corrido rumores de un bloqueo intencionado… Su reaparición en la Pasarela fue apoteósica. Cuando al terminar la colección salió a saludar con su bata blanca de costurero el público le aplaudió puesto en pie. Su nombre ha figurado desde entonces en Cibeles donde ha aportado la perfección de su línea y de su impecable costura. Hemos visto contemporanizados sus famosos contrastes bicolor, alguna reminiscencia arquitectónica suavizada por el tiempo… El rosa smoking, el verde esmeralda, los amarillos sorprenden a veces como flashes de cromatismo en sus colecciones, pero para él, el negro tiene una fascinación especial. Sus contrastes en blanco y negro han sido siempre uno de sus puntos fuertes

"Soy andaluz -dice- y mi Andalucía es en blanco y negro. Las tapadas de Vejer, los pueblos blancos encalados, las viejas vestidas de negro. Claro que la Andalucía que triunfa en todas partes es la alegre, la de los colorines. Pero yo soy cordobés y Córdoba es una parte de Andalucía con unas características especiales. El cordobés es serio, introvertido…"

-¿Cómo juzga el itinerario de la moda española desde que empezó hasta ahora?
La moda ha tenido una relación muy directa con el movimiento del país. Yo he vivido los años más gloriosos de la costura que fueron los 60 y los 70. El protagonista de aquella época fue Balenciaga, ahora la gran estrella de la moda española es Zara, pero el pret a porter de Cibeles no está en el mundo y Zara está en todos los países…

-¿Se considera un hombre con suerte?
La suerte la tiene que hacer uno trabajando y yo he trabajado mucho. Amo mi profesión por encima de todo y sigo trabajando con la mi

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