MAYA HANSEN: "MIS CORSÉS SON MENOS RÍGIDOS QUE HACE UNOS AÑOS"
ENTREVISTA, Marzo 2016
Maya Hansen

O/I 2016-17
Hablar de Maya Hansen es hablar de corsetería de lujo. Su “leit motiv” es la silueta femenina definida por el corsé. De ahí parten todas sus creaciones, que suele presentar en la pasarela con un toque de vanguardismo y siempre con la colaboración de artesanos de distintas ramas, tanto en zapatos, como en tocados o joyas. Ha vestido a celebrities como Lady Gaga, Kylie Jenner, Nieves Álvarez, Laura Pausini, Rossy de Palma, Mya, Alaska, Paz Vega, Mónica Cruz y las mexicanas Claudia Álvarez o Patty Cantú, entre otras. Hablamos con Maya a pie de pasarela en la reciente Mercedes Benz Madrid Fashion Week con su colección colgada en el vestuario del backstage.
De padre argentino y madre danesa, Maya Hansen nació en Madrid, donde se graduó en el Centro Superior de Diseño de Moda con Matrícula de Honor. Pasa sus colecciones desde 2010 en la Fashion Week de Madrid, ha ganado varios premios y participado en proyectos de diseño y exposiciones, muy recientemente en la exposición “Vitrina de la moda”, en la sede de la Asociación de Creadores de Moda de España (ACME), de la que ya informamos en asmoda.
Su marca está presente en tiendas de España, Suiza, Polonia, Países Bajos, Estados Unidos, México, Canadá, China, Hong Kong, Japón, Nigeria, Arabia Saudí, Reino de Bahréin, Líbano y Kuwait.
-Comenzaste en 2006 con tu propia marca, ¿cómo estás celebrando estos diez años? -¡Uy! ¡Es verdad! No lo había pensado: son ya 10 años… ¡Pues en mi próxima colección tendré que hacer algo especial de “Cumpleaños feliz”!

O/I 2016-17

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MAYA HANSEN: "MIS CORSÉS SON MENOS RÍGIDOS QUE HACE UNOS AÑOS"
-¿Por qué especializarte justo en corsés, algo que se ha definido como opresivo para la mujer? -Sí, el corsé es difícil, por eso era un reto para mí. Es una prenda compleja de construir, compleja de llevar y compleja de comprender. Yo intento suavizar las formas; por ejemplo, pongo cremalleras para que sea fácil de llevar. La construcción es parecida a un corsé pero mucho más suavizada, aunque lleva ballenas, encajes, lazos de seda… Es una prenda muy femenina.
-¿Cómo has evolucionado en estos años? -Hace cuatro o cinco años hacía corsés mucho más rígidos. Esta es mi décimo quinta colección y ahora hago vestidos encorsetados pero son de tejidos cómodos y elásticos como en neopreno, flexibles y con cremalleras, que no restringen y realzan la figura. Además, ahora pienso más en la venta. Mis clientas quieren menos escote o no quieren enseñar los brazos o ir menos ajustadas. Y yo voy adaptando mis diseños a ellas. A mí lo que me gusta es escucharlas y siempre busco opciones.
-En esta nueva colección, Waterglazed, como en otras, tus tejidos tienen un gran protagonismo… ¿Dónde buscaste la inspiración? -En este caso, primero encontré los tejidos y después tomé el hilo conductor del tema. He usado tejidos ricos, brillantes, rayón, viscosa con hilos de lúrex, polipieles metálicas, tejidos esponjosos, fieltros cálidos, rejillas en 3D… Y esos colores fríos como el verde agua, turquesa, gris hielo, nude, y los matices nacarados, y los metalizados en tonos de la tierra: cobre, platino y antracita. Con estos tejidos pensé en una historia basada en los meses más fríos del invierno, con la fuerza de la naturaleza, ríos helados, montañas nevadas, brumas iridiscentes, aguas escarchadas, que poco a poco se va abriendo a la primavera. A veces la inspiración me viene sola y a veces tengo que salir a buscarla.

En el backstage

P/V 2016

P/V 2016

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-Tus corsés son más suaves que otros años… -Es cierto, pero es por eso que digo de acercarme a más público. Sigo empleando vestidos-corsés porque sientan muy bien pero no oprimen. Mis clientas comparten el gusto por los volúmenes y por prendas muy bien patronadas y trabajadas.
-¿Qué tipo de clienta tienes? -En una mujer sofisticada, algo alternativa, segura de sí misma y son prendas para lucir de noche. Pero he abierto el espectro, y también fabrico mucho para los países árabes y Asia. Queremos enfocarnos allí.
-¿A qué creadores admiras? -Me gusta mucho el trabajo de Stephane Rolland, que sabe combinar el lujo con la industria textil. Pero para mí el maestro de los maestros es Roberto Capucci. Luego vinieron los demás: Rolland, McQueen, Marchesa… Pero Capucci es el maestro de los volúmenes y me encanta. Yo suelo admirar a los diseñadores que tienen detrás a un gran equipo de gente trabajando y eso se nota en sus creaciones. Es lo que nos falta en España.
-¿Qué es para ti el lujo? -Para mí el lujo es la artesanía, pero un buen diseñador tiene que saber encontrar el equilibrio entre ese buen hacer y lo comercial. El verdadero lujo es poder tener una persona que trabaje 25 o 50 horas en un bordado para ti y el diseñador que lo consiga. Yo creo que es una mezcla entre la artesanía y la industria.
-¿La moda es un espectáculo? -Sí, pero también debe tener a la industria detrás. No tenemos apenas apoyos, nos tenemos que financiar nuestras colecciones, y eso que los diseñadores estamos siempre haciendo I+D y es una pena que no se nos considere parte de la Cultura como, por ejemplo, a los cineastas. Además nos hace mucho daño el fast fashion, con ropa barata que se fabrica por miles de unidades, y los creadores de moda estamos como en otro mundo y sin una industria textil detrás.
-¿Y con qué disfrutas? -Disfruto mucho con el proceso creativo. Justo esta parte de la pasarela, de exposición pública, de fotos etc, es lo que más me cansa, es muy pesada. El proceso creativo me encanta, es algo bastante íntimo, trabajo en soledad en diálogo constante con las ideas.
-¿Proyectos para este año? -En marzo me voy a París, a un showroom donde mostraré la colección. Estoy trabajando con una comisaria de moda, que ha trabajado con Delpozo y Chanel, para que me asesore. Esta figura es muy importante para mí porque me orienta y me guía. Tú puedes ser un genio creativo pero cuando un experto en moda ve tu estilo y te va enfocando por dónde ir, es algo muy bueno para tu carrera.
-¿Qué sueños tienes por cumplir? -Me gustaría desvincularme del proceso industrial, tener un equipo intermedio… y centrarme sólo en la creación.
-¿Con qué te relajas de tanto trajín? -Voy una vez al mes al osteópata para que me “redirija” los huesos. Y practico meditación: ¡me estoy volviendo muy espiritual!
Fotos: Asmoda y Image.net