EL MAYOR EVENTO DE LA MODA ESPAÑOLA
COLECCIONES, Febrero 2019
The 2nd Skin

Teresa Helbig
La 69 edición de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid ha transcurrido entre el 24 y el 29 de enero. Unos días apretados de desfiles que nos han dado las claves de la moda otoño invierno del 2019-20. Cuarenta y dos diseñadores españoles han subido sus creaciones a la pasarela. Ha habido ausencias muy notables pero también nuevas incorporaciones y entre todos han dado la imagen de una moda creativa, y muy variada que casi da la razón a los que opinan que actualmente hay que hablar más de “modas” que de “moda”, tal es la diversidad de las tendencias. Pero entre el batiburrillo general destacan algunos temas comunes: nos espera un invierno superbrillante con dorados, plateados, y lentejuelas de mil colores, muchas faldas con largos desiguales, los flecos continúan imbatibles así como los materiales de pelo largo. Noches de terciopelo y satén. Dominan algunos temas de sastrería y se insinúan las siluetas oversize…
TERESA HELBIG: PREMIO A LA MEJOR COLECCIÓN Un premio que nos parece muy bien merecido porque la creatividad y la perfección artesana de la diseñadora catalana son excepcionales. La referencia a las “brujas de antaño” que aparecían como el hilo conductor de la colección, es lo que no casaba demasiado con la exquisitez y elegancia de las prendas. La colección parecía más un maravilloso cuento de hadas que una historia de brujas… Los tejidos empleados partían de un minucioso trabajo de investigación en el taller. Prendas sofisticadas con terciopelos y dorados, grandes lentejuelas y cuadros tartán. Los estampados reproducían la figura de animales salvajes. El final fue espléndido: un romántico vestido de novia con grandes volantes escalonados y adornos hechos con encaje de bolillos. Era el primer traje de novia de Teresa Helbig en pasarela. Su confección significó 200 horas de trabajo.
THE 2ND SKIN: QUERIDOS AÑOS 50 En este segundo desfile la pasarela dio un giro de 180 grados con la elegancia mesurada de esta firma del dúo Antonio Burillo y Juan Carlos Fernández que se ha inspirado en los años 50 para sus modelos con volantes, terciopelo, lazos y asimetrías. Hay un color que casi se está convirtiendo en sus señas de identidad que es el azul porcelana, que forma un llamativo contraste bicolor con zonas del vestido en negro, y que se encuentra también entre los tonos pastel de los estampados. Los volantes de todos los tamaños rematan muchos escotes o cuellos a la caja y las ristras de pluma dan movimiento y calidez a algunos modelos.
ANA LOCKING: FUTURISMO INCONTROLADO Esta diseñadora, a la que le gusta utilizar la moda para transmitir mensajes, fue la encargada de abrir los desfiles del primer día dedicado a los creadores ya consagrados que se presentaron en la pasarela de IFEMA. Esta vez su mensaje nos sitúa frente a la historia de un niño alemán, Kaspar House, que vivió en cautividad hasta los 16 años y su dificultad después para poder relacionarse… Toda esta historia es una llamada a la falta de comunicación de la sociedad actual que da pie para una moda supervariada individualista y arriesgada, un look futurista con mezclas de estilos que traspasan el terreno de .la originalidad para mostrarnos el de la extravagancia. Asoma en algunos momentos la estética juvenil con bombers, parkas y chubasqueros de tejidos tecnológicos y acabados laminados. Muchas lentejuelas y dorados. Entre el colorido destacan los tonos burdeos, morados y el rojo intenso. Hacia el final de la colección el ambiente pareció serenarse con unos bonitos vestidos de noche negros con volantes de inspiración española.

Hannibal Laguna

Roberto Verino

Custo Barcelona
EL MAYOR EVENTO DE LA MODA ESPAÑOLA
HANNIBAL LAGUNA: EXOTISMO A LA CARTA El nombre de esta colección ya nos desvela sus intenciones. Se llama “Exotical” y explora las culturas de diferentes partes del mundo. En ella brilla la estética suntuosa que no falta nunca en las colecciones de Laguna que esta vez se plasma en siluetas con acertados volúmenes y bordados tridimensionales. El satén da vida a unas faldas largas o pantalones amplios combinados con blusas estampadas. Parece que este diseñador le ha cogido el gusto a los estampados que ahora presenta de forma mucho más asidua no solo en los trajes de noche sino en algunos de tarde que ha introducido en su colección. Sus siluetas fueron una vez más un prodigio de lujo y feminidad.
ROBERTO VERINO: PRIMAVERA EN EGIPTO Hasta ahora la moda otoño invierno 2019 había dominado el panorama pero con Verino ha vuelto la primavera. En su opción, que parece firme del “see now by now”, nos lleva a sumergirnos en la mágica belleza de Egipto. Su colección llamada “Marhaba” -que en su versión al español significa ¡Hola!- nos da la bienvenida a la nueva estación. El atractivo “look-explorer” se materializa en unas prendas exquisitas de aire colonial, saharianas de lino, faldas-pantalón, vestidos de aire lencero y camiseros que contrastan con elaborados diseños drapeados. El colorido rememora los colores del desierto. Blanco, tabaco, beige, lavanda, oro… Espléndidos bordados con motivos de la cultura egipcia sobre etéreos vestidos de organza.
ROBERTO TORRETTA: CLASICISMO Y MUCHO MÁS La influencia de la sastrería masculina campea en esta primera parte de la colección que Torretta define con la palabra “tailoring”, a la que se une modelos muy femeninos con largo midi y faldas con el bajo asimétrico que descubren las botas altas siempre en colores suaves -blanco, lila, azul pálido- y animan los tonos serios que dominan las prendas invernales. Abrigos y chaquetas oversize, vestidos de sofisticadas siluetas ajustadas en blanco y negro y una amplia gama de azules. Los estampados de flores se unen al tono clásico renovado de la colección y la noche busca la fluidez de los tejidos nobles y los contrastes negro y oro.

Jorge Vázquez

Marcos Luengo

Duyos

Agatha Ruiz de la Prada

Beatriz Peñalver

La Condesa

Pedro del Hierro

Ulises Mérida

Pilar Dalbat
DUARTE: SASTRERIA RENOVADA El punto fuerte de este diseñador es la sastrería con detalles muy personales. Se nota que antes de lanzar su firma en el año 2015 ha estado curtido en talleres de prestigio como Sybilla, Ángel Schlesser y Mango. La colección demostró su gran dominio del patronaje. Aunque la mayoría de las prendas eran masculinas salpicó el desfile con modelos dedicados a la mujer. El colorido estaba dominado por el negro, el gris y otros tonos otoñales. Chaquetas oversize y chalecos acolchados fueron algunos de sus modelos más destacados.
CUSTO: FUTURISMO INDIVIDUALISTA Su colección fue un derroche de creatividad y de mezclas a tope porque el principal objetivo de este diseñador es individualizar las prendas dentro de un mundo global que tiende a la uniformidad. No había dos prendas iguales en esta colección. Las combinaciones de materiales y colores recurrían a las mil posibilidades de la geometría para trazar psicodélicas combinaciones de un colorido sin fronteras. Estampados con animales y vegetales, botas superlargas, volantes, flecos y lentejuelas, chaquetas con patronaje deportivo hechas con materiales sofisticados como el lúrex y el terciopelo. Todo, prendas únicas de un diseñador también único.
JORGE VAZQUEZ: RIQUEZA ORIENTAL Brilló una vez más con su moda elegante y muy femenina. Se inspiró en el Oriente próximo y en el lujo oriental. Vázquez, un triunfador en la Fashion Week madrileña por 3 veces, pasa un momento estupendo. Su clientela cada vez registra nombres más interesantes y se ha convertido en uno de los diseñadores más apreciados por la jet. Para el próximo otoño- invierno ha elegido colores vivos y vibrantes y los atardeceres del desierto han inspirado deliciosos vestidos de noche ligeros como flotando en el aire. Una de sus siluetas preferidas lo forman los conjuntos de tops ceñidos y faldas acampanadas de una exquisita elegancia.
MARCOS LUENGO: NOCHES DE TERCIOPELO Joaquín Mir “el pintor de la luz y los colores” ha inspirado el cromatismo de Marcos Luengo, el diseñador que ha trasladado con éxito su experiencia de 20 años en su taller de Oviedo a la pasarela madrileña. El colorido de sus prendas gira en torno al amarillo, naranja, azul, violeta. El terciopelo es el tejido “estrella”, liso o troquelado y bordado con pailletes. Audaces mezclas de tejidos y estampados y cinturones con hebilla que estilizan la silueta. Superposición de prendas. A pesar del protagonismo del pantalón, destacan las faldas en crep de lana doble y las napas plisadas.
MALNE: PODEROSA SOFISTICACIONUna colección sofisticada y poderosa que pone fin a la 69 edición de la Madrid Fashion Week para el otoño invierno 2019-20. Paloma y Juanjo, los componentes de Malne, son maestros en el arte de las mezclas y han mezclado con acierto ideas de la Alta Costura con las de la sastrería y tejidos de distintas clases. El negro ha sido el color triunfante, los hombros estilo pagoda se han mostrado como las señas de identidad de la firma y la nota más exótica, las camisetas blancas con neopreno estampadas con animales salvajes. La moda ha bajado el telón y ha puesto fin a la 69 edición de una interesante y diversa presentación de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid. ¡Hasta julio!
AGATHA RUIZ DE LA PRADA: SABOR A CARAMELO Sus desfiles están siempre a rebosar, con gente hasta por el suelo. A ritmo de música pop española de los 70 que invitaba a salir a bailar, su propuesta no difiere de otras: tejidos brillantes, rayas grandes, cuadros en damero, corazones, lentejuelas, colores chillones. En realidad, para el grueso de la colección las líneas son tradicionales pero el colorido y los estampados genuinamente Agatha. La pasarela la aplaudió a rabiar cuando sacó vestidos-tarta, faldas trapecio de plástico, vestidos con huevos fritos y con estrellas de Navidad, tops y faldas con forma de caramelo y conjuntos balones de playa. Los tejidos: seda canaria de El Paso, algodón y muchos brillos. Y como complemento estrella unas zapatillas galácticas de 12 centímetros de plataforma.
DUYOS: LA ESENCIA ESPAÑOLA Uno de los veteranos de la pasarela madrileña, Juan Duyos ha querido homenajear las tradiciones de España y sus regiones, inspirándose en los paisajes castellanos, en las flores andaluzas o en los trajes regionales. Con un bodegón barroco de frutas, flores, candelabros y vajilla de la Cartuja en mitad de la pasarela, y música de Falla y Albéniz, ha presentado una colección de estampados barrocos y líneas fluidas. Vestidos floreados sobre terciopelo devoré, jacquards de seda estampada, flecos, lamé de cuadros, trajes de chaqueta en terciopelo negro, volantes, vestidos largos y conjuntos de vestido y abrigos a juego. Una colección bonita y femenina con movimiento y esencias españolas. Y promete un segundo capítulo.
ULISES MÉRIDA: DANUBIO AZUL “Vals” es la propuesta que el diseñador toledano ha presentado acompañada de colaboraciones con artesanos en cuanto a joyas, calzado y bolsos. Con el más célebre de los valses como música fondo, las modelos se deslizaban por la pasarela mezclándose entre sí y mostrando la idea de Ulises Mérida de las parejas de los valses que cuando bailan mezclan sedas y levitas en los giros sobre sí mismos. El gazar de seda, el satén, las gasas y los tules conviven con otros materiales más estructurados, como paños de lana, punto grueso, cuellos de piel de pelo, un tricot irregular, telas enceradas y lentejuelas rectangulares. En la paleta de colores manda los vivos, sobre todo los morados, fucsias, verde apagado, amarillos, naranjas y azul marino intenso, en vestidos envolventes, suaves cintas y conjuntos de pantalón capri y chaqueta.
MIGUEL MARINERO: NO SOLO PELO El peletero y su hijo Nicolás no se ciñen solamente al género de la piel sino que presentan textiles que complementa sus propuestas. Esta vez nos abren sus “Archivos” volviendo la mirada a los 70, la década de los primeros años de la firma y que ha aflorado con fuerza en varios diseñadores de esta edición. Trajes de chaqueta atemporales de tweed mezclado con lúrex, faldas de napa y terciopelo, sastres en lanas de cuadros, organza de rayas, estampado animal y muchos ribetes de piel que rematan las prendas. En cuanto a líneas, pantalones campana, hombros marcados y un cierto aire vintage. Chaquetas cortas de pieles tintadas de línea cuadrada y abrigos envolventes. Los tonos principales pasan por los naranjas, ocres, amarillos, negro, blanco, rojizos y verdes atornasolados.
LA CONDESA: UNA LADY CIENTÍFICA Marina Conde ha dedicado su colección a Ada Lovelace, hija de Lord Byron y que nació en Inglaterra en 1815. A pesar de ser aristócrata, fue rebelde y moderna al sentir una verdadera pasión por las matemáticas y las ciencias, desarrollando las tarjetas perforadas para enviar información a los telares de Jacquard y con las que ya en el siglo XX funcionaron las primeras computadoras. ¿Cómo hubiera vestido Lady Lovelace hoy? Seguramente con los trajes de chaqueta de la firma La Condesa. Estos se combinan con faldas de muchos metros de tul, blusas con encajes, lazadas, chorreras y volantitos en las mangas, así como unas primorosas chaquetas de amazona con bordados heráldicos, en tejidos Jacquard con estampados de flores, tarjetas perforadas y coronas.
JUAN VIDAL: PROPUESTA VARIADA Con el front row liderado por Raquel Sánchez Silva y María Escoté, presentadoras de Maestros de la Costura, Juan Vidal ha presentado la colección Angela’s Pizza, con mucha variedad de prendas y siluetas, compuesta por gabardinas en gris antracita, abrigos con grandes solapas y mangas ranglán, chaquetones de cuadros escoceses, también vestidos quipao de estilo chino con delicados estampados florales, y vestidos negros en los que destacaban las mangas jamón. Los tonos: grises, rojizos, morados, negro, crudo y azules.
BEATRIZ PEÑALVER: EL MISTERIO DEL DESIERTO Esta joven diseñadora granadina, proveniente de la pasarela EGO, ha mostrado lo que sabe hacer con tejidos y líneas. Con una decoración a base de arenas del desierto, su colección O/I que ha titulado Nómada, muestra la evolución de una expedición tuareg en el Sahara. Las líneas ondulantes de las dunas, las tormentas de arena se ven reflejadas en el movimiento de los vestidos, capas y abrigos, envolventes unos, sueltos otros y con suaves curvas en bajos, mangas y volantes integrados en la prenda. Tejidos de viscosa, terciopelo, lana, algodón, gasa bambula en tonos tierra, anaranjados, ocres, cobrizos, marrones en contraste con azul claro y marfil. Como detalles especiales, flecos largos y prendas guateadas. El calzado, los turbantes y tocados han sido diseñados también por Beatriz Peñalver.
INÚÑEZ: ACUARELA INTIMISTA Con música en directo a cargo de la vocalista Carlota Mad, el desfile de INuñez transcurrió de una forma sosegada e intimista. El impresionismo de Monet y los tonos azules liliáceos, rosados y los melocotones suaves sobre la base del negro destacaron en el conjunto de la colección, desdibujada como una acuarela. Chaquetas de corte masculino combinadas con faldas midi y pantalones, vestidos sueltos con cortes al bies y detalles drapeados o plisados en sedas, algodones, lanas y terciopelos con toques de plata, como un sastre pantalón realizado en tono plata opaca. Isabel Núñez demostró su maestría también en los plisados apretados estilo Fortuny para faldas y vestidos, cuya cintura estaba enriquecida con salpicaduras de piedras brillantes.
EN OFF Hubo muchos desfiles fuera de Ifema en lugares emblemáticos, como el Teatro Español, la Casa de la Villa, el Ayuntamiento de Madrid o espacios como el ISEM o Matadero. Entre los “off”, destacamos Oteyza, Premio Nacional de Moda 2018. La marca de sastrería ha revolucionado el concepto de moda masculina, devolviéndonos a épocas pretéritas y, sin embargo, dando una visión absolutamente vanguardista de las prendas masculinas, que pueden ser llevadas también por mujeres. Los creadores de Oteyza siguen reivindicando la tradicional capa española, a veces tradicional, y a veces renovada, en tonos marengo, marfil y mostaza.
Ailanto presentó su colección basada en el Optical Art, con composiciones que parten de figuras geométricas apoyadas en elementos lineales que se repiten. Trajes de chaquetas, abrigos, faldas de flecos y vestidos llenos de frunces, lazadas y tableados.
Pilar Dalbat hizo una presentación para el invierno 2020 con unos exquisitos modelos en lana cachemere, terciopelo, gasas, neopreno estampado y tejidos metalizados en tonos negro, rosa y blanco. Los estampados están inspirados en la magnifica bóveda-vidriera del Patio de Cristales de la Casa de la Villa de Madrid en vestidos largos hasta los tobillos combinados con abrigos y capas de líneas rectas, y parkas y pantalones de pernera con vuelo. Los sombreros, muy especiales, daba a cada look un cierto aire de bruja.
Pedro del Hierro presentó colección para Primavera-Verano 19. Colores de verano en playa y ciudad, en turquesa y arena para el día, junto a blancos y negros, hasta elevarse a rojos en las tardes y noches. Clasicismo renovado y buen gusto, para mujeres que huyen de la moda rápida y se detienen en la estética.