PENÉLOPE CRUZ, OSCAR A LA MEJOR VESTIDA
ESTILO, Febrero 2020
El vestido de Penélope Cruz

Dando uno de los premios
El maridaje entre la moda y el cine se remonta a los inicios del séptimo arte. Esta unión armoniosa no sorprende, pues el glamour de Hollywood casa a la perfección con las aspiraciones que evoca la alta costura. Las firmas de moda lo saben, y por eso cada año pugnan por vestir a las actrices que pasearán por la alfombra roja del Dolby Theatre de Los Ángeles en la gala de los Oscars, los premios más populares de la gran pantalla. El pasado domingo, la ganadora de la 92 edición del certamen fue, en opinión de la crítica, la maison francesa Chanel, y la mejor vestida, la actriz española Penélope Cruz.
La madrileña lució un vestido de organza de color negro, con escote halter (cruzado al cuello) y cuerpo entallado. De caída amplia y voluminosa, seguía la silueta conocida como tail-hem, una tendencia de principios de la década de 2000, caracterizada por un diseño largo por detrás y un poco más corto en la parte delantera. En este caso, para dejar ver el tul del interior. Resaltaban detalles como un lazo frontal en el escote, que la actriz remató con una llamativa camelia blanca, y un cinturón de perlas, ambos grandes emblemas del estilo de Coco Chanel. Completaban el look unos tacones de salón atados en el tobillo y unos bonitos pendientes de brillantes en forma de lágrima de Swarovski.
Para el peinado, Penélope eligió llevar la melena suelta, perfectamente planchada y con raya en medio. Gracias a Lancôme, acertó de pleno con un discreto maquillaje de sombras color tierra, colorete melocotón y labios nude. Y, no podía faltar, la manicura francesa.

Yasmeen Ghauri en 1995 y Penelope 2020

Las joyas Swarovski

En la gala de los Oscars
PENÉLOPE CRUZ, OSCAR A LA MEJOR VESTIDA
Virginie Viard, la directora creativa de Chanel tras el fallecimiento de Karl Lagerfeld, escogió como inspiración un vestido de la colección de alta costura de la casa francesa, con el que la modelo Yasmeen Ghauri desfiló en la temporada primavera-verano 1995. Viard lo recreó a medida de la silueta de la actriz española para que la prenda le quedara como un guante. La confección del vestido llevó más de 230 horas de trabajo, con seis modistas a tiempo completo. La camelia blanca que llevaba sobre el escote se hizo en los talleres de Lemarié por un métier d'art de la firma.

El vestido Chanel de Lucy Boynton

Margot Robbie con su Chanel

Vestido de Margaret Qualley
La artista, que presentó uno de los premios, ha dejado de lado por una noche a la firma Ralph & Russo, que la ha vestido en los últimos meses, para volver a Chanel, de la que se presenta una vez más como una de sus mejores embajadoras. Otras actrices que también optaron por la maison francesa para la noche del cine fueron Margot Robbie, Lucy Boynton y Margaret Qualley.