PON UN ALOE EN TU VIDA
IMAGEN, Septiembre 2020
Gel de aloe vera

Los beneficios para la piel
Este año está siendo raro, pero si has tenido la suerte de poder escaparte, seguramente que de lo último que has cuidado ha sido de tu pelo. Además la realidad es que salvo muy contadas excepciones, los protectores capilares son muy poco efectivos contra las agresiones del sol y del mar. También la piel se ha visto dañada y probablemente más que de costumbre, porque durante los meses del confinamiento no has visto la luz del día y cuando nos han dado “permiso”, hemos salido escopetados a bañarnos de rayos del sol, a respirar aire sano o a subir a los prados más altos… Estábamos necesitados de libertad y esto puede que haya mermado nuestra conciencia de protección. No pasa nada, todo tiene solución.
No voy a hablar de productos comerciales. Me estoy encariñando con los elementos base de los productos más eficaces, por ejemplo el aloe vera. Si no lo sabes, el aloe es un arbusto de tallo corto -confundido con los cactus muchas veces-de propiedades curativas y cicatrizantes tan extraordinarias que un libro entero no bastaría para describirlas.
El Doctor Arsenio Meza, cirujano plástico (ya jubilado pero padre de las técnicas más avanzadas de la cirugía actual, artífice de las mejores obras de rostro y cuerpo de las personalidades más destacadas del panorama español) aboga por acudir a la esencia de los elementos. No adquirid una crema facial con aloe vera ya que en el proceso de elaboración han tenido que someter el aloe a altísimas temperaturas para su conservación y esto hace que el aloe pierda la mayoría de sus propiedades. ¿Lo mejor? Adquiere una planta o varias para tu casa, en tu baño por ejemplo y vas empleando su valiosísimo gel cada día en tus rutinas. Los resultados son indescriptibles.
La forma de emplear el gel del aloe es tan variado como valioso. Puedes cortar una pequeña porción del tallo y aplicarte el gel directamente sobre el rostro limpio, dejar que se seque y luego aclararlo e hidratarte, puedes cortar una hoja completa, vaciar su gel y batirlo, para mezclarlo con hidratantes de cara, con aceites esenciales y neutros como de romero para que se abran los poros o de almendras para hidratar la zona a tratar. También hay personas que lo baten con el zumo de un limón o con el famoso batido de espinacas para solucionar problemas digestivos o intestinales.

Aloe vera puro

Plantas de aloe vera

Bebida de aloe vera
PON UN ALOE EN TU VIDA
La consecuencia de la aplicación de la savia será la cicatrización y regeneración celular de la zona donde se ha aplicado. Ya sea piel o ingiriéndola. Existen personas que han necesitado de medicación para la digestión toda su vida y ahora, tras unos meses ingiriendo con asiduidad el aloe vera con un zumo en las mañanas, han visto solucionado su problema. ¿Cómo puede ser esto? Porque la savia ha cicatrizado la lesión ya sea en el estómago como en los intestinos, ha regulado el flujo y así con todo el sistema digestivo. Incluso para llagas de la boca.
Si te animas a comprar un par de plantas, te recomiendo que mejor cortes una hoja entera cada vez, para que la planta sufra lo menos posible. También puedes comprar una hoja entera en una tienda naturista seguramente. Dejas en remojo el tallo durante varias horas (al menos tres) para que se desprenda la aloína que teñirá el agua de un color amarillento. Una vez limpia de aloína, puedes proceder a abrirlo y sacarle toda la gelatina. Verás que resulta pringoso y hasta pastoso, hay gente a la que que no le agrada esa viscosidad, sencillamente puedes lavarla y el gel aprovecharlo. Yo suelo meterlo en una batidora así que no me molesta esa pringue en absoluto. Un hoja entera da para muchísimos botes, para conservarlo puedes congelarlo, meterlo en la nevera o mezclarlo con aceites naturales.
Yo tengo un bote con aceite de coco para el pelo; otro con aceite de almendras para la piel. También le añado aceite esencial de romero, sólo unas gotitas, porque es muy concentrado y si pones mucho puede ser dañino (esto ocurre con todos los aceites esenciales), el aceite de romero abre los poros y activa la circulación.

Aloe para el cabello
Es importantísimo saber distinguir lo que es un aceite esencial (se ha extraído la esencia de una planta y contiene una altísima concentración de sus extractos) y un aceite virgen: es un jugo obtenido de la primera prensada en frío de un fruto, sin más elaboración que ése. Los aceites son conservantes naturales, por lo que al mezclar el aloe con los aceites de almendras, de oliva o de coco te dura mucho más sin necesidad de congelarlo. Yo llevo tres meses usando el mismo bote aloe de una hoja con aceite de coco y lo empleo tanto para el pelo como para la piel; además, reconozco que es el verano que mejor lo tengo. Lo más gracioso es que mi marido dice que huelo a galletas por el olor del coco…
En el rostro, prefiero usarlo en muy pequeñas cantidades. Aprovecho los botes de cremas de cristal que se me han acabado e introduzco el gel (previamente batido) con un poco de aceite de almendras. Me lo aplico por el rostro limpio y cuando me lo ha absorbido, aplico mi hidratante de siempre.
Para ingerirlo, es bueno saber que no tiene sabor ninguno apreciable, así que puedes tomarlo con limonada natural, miel y hielo todo batido; o en las mañanas añadirlo en el zumo de limón y es sensacional para el reflujo, las malas digestiones y regular el tránsito.
Yo tuve una época en la que regalaba libros, ahora regalo aloes. Pon un aloe en tu vida. O mejor dos.