LA MODA Y LA BATALLA POR LA VIDA
OPINIÓN, Julio 2022
Camisetas pro aborto

Desfile Gucci en Nueva York
En los últimos días del mes de junio ha tenido lugar una decisión histórica en el Tribunal Supremo de Estados Unidos. Se trata de la anulación de la sentencia que en el año 1973 obligó a legalizar el aborto en todo el país. Esta sentencia deja ahora la decisión de algo tan fundamental como es la vida en manos de cada uno de los Estados. Algunos ultiman leyes contra esta práctica y defienden con tesón al no nacido apoyados por los movimientos pro-vida, pero otros parece que no la van a garantizar. La suerte está echada y la batalla por la vida se presenta más eufórica y vibrante que nunca. Es el momento de conocer y afianzar las posturas de un debate de tanta magnitud.
Sólo unas horas después de la sentencia estadounidense, en Madrid se celebraba la marcha por la vida que reunió a muchos miles de personas de los pujantes movimientos Provida que existen en España junto con la plataforma “Cada vida importa”. La manifestación, que reunió a más de 200 asociaciones y tomó un aire familiar festivo y alegre, estuvo muy marcada por el contenido de la histórica sentencia que, según destacaron los organizadores, “demuestra que la vida está más viva que nunca y con la esperanza de que esto podamos verlo también en España y en otros países del mundo”. El lema de la manifestación era muy elocuente: “Nos jugamos la vida”.
Sin embargo, la batalla sigue entre la cultura de la vida enfrentada a la cultura de la muerte, y la multinacional de la moda desgraciadamente, o al menos una parte importante de sus miembros, se han posicionado públicamente a favor del aborto al que pretenden seguir conservando como un derecho protegido cuando ni siquiera implícitamente hace referencia ningún articulo de la Constitución y, por tanto, ha podido dejar de contar a nivel estatal y cada estado tendrá la responsabilidad de poder regularlo.
Sólo dos días después del fallo del Tribunal, varias multinacionales y firmas de moda de prestigio han salido en defensa del “derecho al aborto”. Como respuesta al giro dado por el Tribunal Supremo empresas como GAP, H&M y LEVI’S han declarado que seguirían velando por la seguridad reproductiva de las mujeres de sus plantillas mediante ayudas y apoyo directo cuando quieran abortar. Otras compañías de la talla de CAPRI, que agrupa firmas como VICTORIA'S SECRET, VERSACE o JIMMY CHOO, han hecho pública una declaración oficial manifestando también que seguirían prestando ayudas al alcance de sus empleadas.

Alessandro Michele

Manifestantes provida

Manifestación pro aborto
LA MODA Y LA BATALLA POR LA VIDA
“Avanzar en la igualdad de género y empoderar a las mujeres son parte esencial de los valores de Capri -son las declaraciones recogidas por el medio de comunicación estadounidense Wwd- A la luz de la nueva sentencia hemos ampliado nuestros beneficios de derechos reproductivos en los Estados Unidos para ayudar a las mujeres a obtener servicios de aborto que no estén disponibles en sus estados de origen”.
En el plano internacional, SALVATORE FERRAGAMO, HUGO BOSS y, especialmente KERING internacional francés, propietario de GUCCI y otras destacadas firmas, respaldadas por las posturas personales de sus creativos han declarado: “La Corte Suprema de los Estados Unidos ha lanzado un ataque devastador contra la libertad de las mujeres". GUCCI se ha distinguido por sus formas extremadamente contundentes alardeando desde el holding internacional francés de proteger los derechos humanos, la libertad de las mujeres y anunciando un sinfín de ayudas. Su director creativo, Alessandro Michele, lanzó varios mensajes desde Instagram junto con la foto de uno de sus últimos modelos de camiseta de su colección con una frase en la espalda “My body, my choice” (mi cuerpo, mi elección).
Resulta curioso comprobar que este tipo de declaraciones parece que defiende solo la libertad personal de la mitad de la humanidad, solo la de las mujeres a las que dirige la responsabilidad, nada menos, que de decidir sobre el bien más preciado: la vida humana. Algunos se preguntan ya: ¿es que los hombres, sus criterios y su libertad no cuentan para posicionarse en algo tan fundamental como es la defensa de la vida de su propio hijo, de un ser humano incluso antes de darle ocasión de cimentar su existencia? ¿Es que el tema de la libertad personal se contempla solo en clave femenina? Es una pregunta que ya muchos se hacen sin que hayan tenido todavía una respuesta acertada.

Marcha por la vida en Madrid
La batalla por la vida seguirá a pesar de todas las sentencias y las posiciones de los implicados. Es un verdadero desconcierto que las multinacionales de la moda nos ofrezcan el espectáculo de sus opiniones impregnadas de posiciones materialistas, egoístas y de falta de sensibilidad. Más acorde con la imagen de la moda son las actitudes positivas y sensibilizadas con la estética pero también con la ética más elemental defensora del más débil, capaces de comprender que el don de la vida es el más digno de ser protegido, el primer derecho humano, fundamento del resto de los derechos.
Las masivas concentraciones demuestran realmente que “la batalla por la vida está más viva que nunca”, como proclamaron los organizadores del evento. Fue una bonita casualidad que la de Madrid coincidiera con las fechas de la decisión del Tribunal Supremo. En las alocuciones de la Plaza Colón que cerraron el gran acto provida madrileño, Jaime Mayor Oreja, promotor de Neos, una de las entidades convocantes, denunciaba que las posturas antivida se basan en leyes “contra la verdad” y así hay que combatirlas y afirmó que "la cultura de la vida siempre va a ganar a la cultura de la muerte, expresión de la esclavitud de los tiempos modernos”.