LOS SECRETOS DEL LEJANO ORIENTE

La juventud en la piel, los cuidados necesarios para mantenernos sin arrugas ni manchas de la edad son los temas que más llaman reclaman mis clientes y todo el mundo a partir de los 30. Hemos hablado con las mayores expertas de España y por qué no, del mundo. Sus clientes habituales son su mejor presentación y su saber hacer dan fruto desde el primer día. Son los secretos del lejano Oriente: Massumeh en casa.

Cada vez que se me presenta un nuevo cliente en el estudio me pregunta, indefectiblemente, la misma cuestión: “¿Cómo puedo hacer para tener la piel más joven?”. Y la realidad es que el mercado está saturado de productos más o menos acertados para los cuidados de la piel, que prometen el oro y el moro y no sabemos bien de quién fiarnos. Como sabéis, el 80% del valor de un producto de belleza es el de su campaña de marketing, donde se incluye el diseño del recipiente y las campañas publicitarias en los medios. Es más, la mayoría de las grandes firmas de moda pagan a celebrities para que luzcan sus bolsos o zapatos en la calle, de cara a publicitarse en los reportajes de “fotos robadas”.

Entonces, ¿cómo sabemos cuáles son las verdaderas firmas de cosmética que funcionan? Hoy os voy a contar un gran secreto, unas buenas amigas que conocen el sector porque trabajan en él y estudian muy de cerca la competencia pueden presumir de tener entre sus clientes a lo mejor del mundo. No hablo de clientela española conocida: hablo de los personajes más poderosos del mundo, desde actores de Hollywood hasta la realeza árabe. Es su única tarjeta de presentación. Ellas no pagan para que se hable de sus productos y tratamientos en las revistas, son las revistas las que se matan por publicar sus entrevistas, porque son sabias, son trabajadoras, estudian con lupa las novedades y, sobre todo, porque su clientela es la más exigente y ellas han de estar a la altura.

Como muchas habréis imaginado, os hablo de Massi y Nasrin, madre e hija, químicas de carrera y sabias de la cosmética de profesión, como si se tratara del mismo alquimista de los príncipes en el antiguo Egipto.

Lo cierto es que cuando llegas a su centro en Madrid -Calle del General Arrando, 6- te sorprende la luz y la blancura de las paredes y los muebles. Pero cuando estás con ellas un rato descubres el secreto de su éxito: estas dos mujeres son una combinación de saber estar, saber trabajar, prudencia e inteligencia. Por no hablar de su equipo, que fue igualmente encantador y experto. Fue un gran placer conocerlas ya que he aprendido mucho de dos grandes profesionales y desde que uso sus productos, cuidarme ya no es una obligación, sino un placer.

-¿Cómo aterrizasteis en España viniendo desde tan lejos?
-Llegamos con la aristocracia árabe a las costas marbellíes, con un gran bagaje desde nuestra tierra y las mejores clientes que nadie pudiera desear. Aquella fue nuestra mejor tarjeta de visita –y lo sigue siendo. Pero Marbella en época invernal no tiene movimiento, así que nos vinimos a Madrid, que nos encanta y desde donde nuestras amigas pueden seguir sus tratamientos el resto del año.

-Un buen tratamiento tiene resultados visibles ¿desde cuándo?
-Si es bueno y acertado, desde el primer día. Y la perseverancia es la clave para que los resultados sean duraderos. Las arrugas y manchas de la edad tienen marcha atrás, pero para que el milagro ocurra, la cliente debe ser perseverante y tratarse a diario la piel.

-¿Cuál es la rutina mínima para lograrlo?
-Debemos hacerlo dos veces al día: por la mañana y por la noche: primero limpiar bien con una leche desmaquillante y un tónico. Después será necesario aplicar un sérum que potenciará cualquier crema que usemos después. Por último, aplicaremos las cremas necesarias según nuestra piel: la hidratante normal y una específica en contorno de ojos y en la zona entre la nariz y el labio que es la parte de la cara que más tocamos a lo largo del día: comiendo, bebiendo, con la servilleta… y debemos rehidratarla no sólo en la mañana y la noche sino siempre que nos acordemos. También es importante aplicar los mismos tratamientos en el cuello y en el escote, así seguirá todo igualmente joven, no habrá diferencias entre las tres zonas. Todo esto no debería tardar más de 5 minutos y si los productos son buenos, lejos de ser una pesadez, serán los 10 minutos más agradables del día.

-¿Y los hombres?
-¡Ellos deberían hacer exactamente lo mismo! Nos han venido multitud de maridos de clientas que nos preguntan qué pueden hacer para estar tan jóvenes como sus esposas, ya que ellas empiezan a parecer mucho más jóvenes que ellos.

-¿Qué os hace las mejores?
-Los tres pilares claves: el estudio, el trabajo y la experiencia. Llevamos 25 años estudiando la piel de cientos de personas y obviamente este bagaje nos da los conocimientos necesarios para definir qué tipo de piel tiene un cliente, qué necesidades, qué tratamientos requerirá… Además, estudiamos muy de cerca los productos que saca el mercado para aplicar nosotras también las mejoras de la tecnología y la ciencia y no quedarnos nunca atrás.

-¿Qué puede esperar alguien que entre por esa puerta?
-Nos adaptamos a las necesidades: vender por vender, sólo daría como resultado clientes decepcionados a la larga. Es mejor aplicar un producto adecuado que cuatro que no sirvan para nada. Si una cliente nos dice que tiene un presupuesto determinado al mes, le ajustaremos el tratamiento a sus necesidades. Ahora puedes encontrar los tratamientos en El Corte Inglés y la asesora de la marca es una persona que tiene los conocimientos y experiencia de la firma, no es una dependienta cualquiera.

-El sol, ¿ni olerlo?
-El sol es necesario para la salud física y mental y disfrutar de él nos enriquece la vida. Pero si quieres tener una piel joven, hay que ser prudentes: tomar el sol no es necesario, se puede estar un día de playa con protección y sombrero y aun así coger un color saludable y atractivo. Es como todo: comer mal, no dormir, tomar el sol, salir por la noche… todo en exceso pasa factura en la piel y en cambio una vida más saludable también se refleja en la piel.